Alabanza eucarística

Tú eres nuestra gloria, Dios nuestro,
aclamado y cantado sin interrupción
por los ángeles en el cielo,
mientras aquí eres celebrado
solemne y sinceramente;
concédenos, por tu inmensa bondad,
vernos libres de todo mal
y poder proclamar siempre tus alabanzas.
R/. Amén.

Por tu misericordia, Dios nuestro,
que eres bendito y vives y todo lo gobiernas
por los siglos de los siglos.
R/. Amén.