Solemnidad del Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo

Este es un icono para contemplar y meditar…

<A ti, Padre supremo, te ofrecemos
esta oblación por tu Iglesia santa,
por la justificación del mundo pecador,
por la purificación de nuestras almas,
por la salud de todos los enfermos
y por el descanso y el perdón de los fieles difuntos,
para que, cuando dejemos esta triste mansión terrestre,
podamos gozar felizmente de la compañía de los justos.
R/. Amén.

Porque tú eres la vida de los que viven,
la salud de los enfermos,
y el descanso de todos los fieles difuntos
por todos los siglos de los siglos.
R/. Amén>.

Recópolis

Recópolis es una antigua ciudad de origen visigodo
situada cerca de Zorita de los Canes (Guadalajara)

Se alza sobre un cerro a cuyos pies discurre apacible el río Tajo.
Las ruinas, en la Alcarria, son visitables.
Fue mandada construir por el rey visigodo Leovigildo en 578.

Funcionó como un centro urbano importante,
capital de una provincia denominada Celtiberia,
al este de la Carpetania (zona de Madrid y Toledo).
En el yacimiento, en la actualidad en curso de excavación,
se conservan los restos del palacio, iglesia, puerta monumental,
calles, edificios comerciales, casas, muralla, acueducto,
caminos de acceso, todo ello musealizado
y puesto en valor para la visita pública.

Los de Emaús…

¡Ya, hoy, te puedes inscribir al Campus que organiza Gothia en septiembre!
Los de Emaús revelan el tema: el sacramento de los sacramentos (Eucharistia).

Un fin de semana para invitar a los amigos a convivir, estudiar y orar con
la espiritualidad hispano visgótica y mozárabe (7 al 9 sept ’18).

Apagado del Cirio en Pentecostés

Sugerencia para el final de la Misa de Pentecostés a fin de subrayar la conclusión de la Cincuentena Pascual
Al concluir la misa del Domingo de Pentecostés, el presidente de la celebración –u otro ministro idóneo- podría apagar el Cirio pascual con una cierta solemnidad.

 

Después de la bendición solemne del día puede cantarse el “Regina Coeli”; luego, un diácono, u otro ministro, puede decir estas o parecidas palabras:

Desde la Vigilia Pascual , el cirio Pascual ha estado presente en nuestras celebraciones, en él reconocemos la presencia de Cristo resucitado y participamos de su vida resucitada y resucitadora.

Ahora como a aquellos primeros discípulos, su Espíritu nos anima a ser sal de la tierra y luz del mundo, a ser testigos de esta luz en nuestros ambientes para comunicar la vida nueva que se nos ha dado.

Los bautizados, por la gracia del Espíritu, somos la presencia resucitada de Jesucristo en medio del mundo, también le encontraremos presente allí donde los hombres y mujeres se aman y trabajan por la justicia y la paz, también entre los pobres y oprimidos.

Vamos ahora a apagar este Cirio Pascual, pero esta luz no se extingue sino que se hace presente en nosotros «todos los días hasta el fin del mundo».

Todos cantan Aleluya; se inciensa el Cirio y se apaga. Después el diácono despide a la asamblea:

“Podéis ir en paz, aleluya, aleluya”.

También el Cirio puede llevarse en procesión al Baptisterio y allí realizar el gesto.
Nota para las comunidades monásticas:
se podría hacer este gesto al terminar las II Vísperas de Pentecostés.

Líderes con la fuerza del Espíritu…

Descienda sobre nosotros, Señor, el Espíritu Santo;
que por medio de él y con él
llegues a poseer nuestros corazones debidamente purificados
y aceptes la plegaria instituida por ti.
Así podrás acoger nuestras peticiones
no por nosotros mismos,
sino por él y también por él
y no por nosotros perdonarás nuestros pecados.

Él, que contigo y con el Padre reina en la igualdad,
intercediendo por nosotros,
nos hace clamar hacia ti desde la tierra, diciendo:

Padre Nuestro…

(monición a la oración dominical antes de Pentecostés)