El círculo

Nos encontramos ante el gran señor de los símbolos, el circulo.

Estamos ante una curva que se prolonga hasta volverse a encontrar.
El circulo es un punto extendido y sus propiedades
son también comunes a las del punto:
perfección, igualdad, ausencia de división o de distinción.
El circulo se considera en su totalidad indivisible,
sin movimiento, sin comienzo ni fin y sin variación alguna.
No teniendo ni  principio, ni fin,
el circulo es también signo de Dios y de lo eterno.
… Es signo de protección contra los malos espíritus y el demonio.