La caridad hacia el prójimo urge a los cristianos a que expresen la comunión con los hermanos que van a morir, implorando con ellos y por ellos la misericordia de Dios y la confianza en Cristo.
Los orantes encontrarán en estas plegarias una fuente de consuelo, don del Espíritu, al descubrir el sentido pascual de la muerte cristiana.
— Acoge, Señor, en tu Reino a tu siervos para que alcance la salvación,
que espera de tu misericordia.
R. Amén.