Dios de poder,
protector infatigable de tu esposa, la Iglesia,
a la que das vida con tu gracia;
te pedimos que por la piadosa intercesión
de tu Madre, Virgen gloriosa,
nos impulses a la observancia de tus mandatos
y nos concedas orar desde la tierra con corazón limpio,
como tú nos enseñas:
Padrenuestro… Amén.
(De la Misa mariana lit. hisp-moz)
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Libros litúrgicos en árabe:
El Patriarcado Latino actualiza los libros litúrgicos en árabe
Icono de la Madre de Dios en el muro palestino