2 comentarios en “Carta de la Santa Sede “Placuit Deo”: aspectos de la salvación cristiana.”
Carta de obispos a obispos. Completa en doctrina y citas bíblicas de apoyatura. Un esfuerzo leerla.
Estupendo el remarcar la corporeidad y «carnidad» del Salvador y la salvación, al criticar el neopelagianismo y neognosticismo del ambiente (entre los amigos espirituales, escasos ya, pues lo dominante es el individualismo relativista y agnóstico).
Pero… de poner un «pero», la carta rezuma (el clericalismo, de obispos a obispos) la idea, difícil de escapar para el clero y curia, de considerar que la Iglesia es el clero, y el resto somos «mirones» aprendices (esto último es cierto, aprendices del misterio). Que pocas veces se dice que Jesucristo el salvador, y en su cuerpo ahora subrayado en esta carta, es un hombre seglar, del mundo y de su pueblo, no un sacerdote o clérigo, por mucho que reelabore la Carta a los Hebreos sobre su «sacerdocio» (anticlerical y antisacerdote del Templo de su tiempo).
Bueno, disculpar una vez mas.
Reflexiona un seglar aprendiz que ama la la iglesia de la trasmisión apostólica, que vive la corporeidad de su existir en este mundo, que lucha por la falsa espiritualización de sus amigos «misticos gnosticos dualistas», que cree en El «pueblo de Dios» llamado Iglesia, que aprecia el testimonio de los cristianos que se muestran con sus obras…corporales… Y que hace un esfuerzo por admirar el magisterio de su los obispos y sacerdotes.
Excelente «Carta» que, haciendo referencia a algunas tendencias actuales de relativismo y de «autoayuda», describen en términos que no admiten duda el camino correcto para el creyento hacia la salvación.
Me ha gustado mucho aunque su lectura requiere, por supuesto, tiempo y dedicación. Pero vale la pena.
Carta de obispos a obispos. Completa en doctrina y citas bíblicas de apoyatura. Un esfuerzo leerla.
Estupendo el remarcar la corporeidad y «carnidad» del Salvador y la salvación, al criticar el neopelagianismo y neognosticismo del ambiente (entre los amigos espirituales, escasos ya, pues lo dominante es el individualismo relativista y agnóstico).
Pero… de poner un «pero», la carta rezuma (el clericalismo, de obispos a obispos) la idea, difícil de escapar para el clero y curia, de considerar que la Iglesia es el clero, y el resto somos «mirones» aprendices (esto último es cierto, aprendices del misterio). Que pocas veces se dice que Jesucristo el salvador, y en su cuerpo ahora subrayado en esta carta, es un hombre seglar, del mundo y de su pueblo, no un sacerdote o clérigo, por mucho que reelabore la Carta a los Hebreos sobre su «sacerdocio» (anticlerical y antisacerdote del Templo de su tiempo).
Bueno, disculpar una vez mas.
Reflexiona un seglar aprendiz que ama la la iglesia de la trasmisión apostólica, que vive la corporeidad de su existir en este mundo, que lucha por la falsa espiritualización de sus amigos «misticos gnosticos dualistas», que cree en El «pueblo de Dios» llamado Iglesia, que aprecia el testimonio de los cristianos que se muestran con sus obras…corporales… Y que hace un esfuerzo por admirar el magisterio de su los obispos y sacerdotes.
Excelente «Carta» que, haciendo referencia a algunas tendencias actuales de relativismo y de «autoayuda», describen en términos que no admiten duda el camino correcto para el creyento hacia la salvación.
Me ha gustado mucho aunque su lectura requiere, por supuesto, tiempo y dedicación. Pero vale la pena.