Celebración de la octava de Pascua

Dios todopoderoso y eterno,
por nuestra redención enviaste a tu Hijo,
que es la Palabra eterna,
y fue engendrado en el seno virginal de María,
para que, revestido de nuestra carne,
nos librase de la carga de nuestros pecados.
Ten piedad de nosotros,
De modo que, podamos decir desde la tierra,
la oración que él mismo se dignó enseñarnos:

Padre nuestro…

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *