Difundiendo el canto gregoriano

Declara el Concilio: La Iglesia reconoce el canto gregoriano como el propio de la liturgia romana; en igualdad de circunstancias, por tanto,hay que darle el primer lugar en las acciones litúrgicas. Los demás géneros de música sacra, y en particular la polifonía,de ninguna manera han de excluirse en la celebración de los oficios divinos, con tal que respondan al espíritu de la acción litúrgica.
(Vaticano II, Sacrosanctum Concilium, 116).

Este domingo «Gaudete» canto gregoriano
en la misa de La Concepción (18 h.).
El domingo siguiente, el 18 de diciembre
fecha memorable en la espiritualidad hispana,
canto en la parroquia de El Plantío (19 h.).

El día 15 de diciembre
-antes de comenzar el «Adviento histórico»-
podemos disfrutar de un RECITAL de canto gregoriano
en la parroquia de san Fco. Javier (La Ventilla).

Tú eres el verdadero Cordero,   
el único sin mancha,   
sentado en el trono de jaspe y ágatas,  
a la diestra del Padre,   
nimbado por el arco iris, orlado de esmeraldas.  
 
Del himno hispano-mozárabe Te centies mille legionum angeli  
en Hymnodia Gotica, pp. 88-89; Breviarium Gothicum, ff. 382-383. 

***

AUDICIÓN.-
Rorate coeli:

Rorate Caeli desúper et nubes plúant justum
(Derramad, oh cielos, vuestro rocío de lo alto,
y las nubes lluevan al Justo)

Ne irascáris Dómine, ne ultra memíneris iniquitátis
Ecce cívitas Sancti facta est desérta
Sion desérta facta est, Jerúsalem desoláta est.
Domus sanctificatiónis tuae et gloriae tuae
Ubi laudavérunt Te patres nostri.

(No te enojes, Señor, ni te acuerdes de la iniquidad.
He aquí que la ciudad del Santuario quedó desierta:
Sión quedó desierta; Jerusalén está desolada.
La casa de tu santidad y de tu gloria,
donde nuestros padres te alabaron)

Rorate Caeli desúper et nubes plúant justum.
(Derramad, oh cielos, vuestro rocío de lo alto,
y las nubes lluevan al Justo)

Peccávimus et facti sumus tamquam immúndus nos,
Et cecídimus quasi fólium univérsi
Et iniquitátes nostrae quasi ventus abstulérunt nos
Abscondísti fáciem tuam a nobis
Et allisísti nos in mánu iniquitátis nostrae.

(Pecamos y nos volvimos como los inmundos,
y caímos, todos, como hojas.
Y nuestras iniquidades, como un viento, nos dispersaron.
Ocultaste de nosotros tu rostro
y nos castigaste por mano de nuestras iniquidades)

Rorate Caeli desúper et nubes plúant justum.
(Derramad, oh cielos, vuestro rocío de lo alto, y las nubes lluevan al Justo)

Víde, Dómine, afflictiónem pópuli tui
Et mitte quem missúrus es
Emítte Agnum dominatórem terrae
De pétra desérti ad montem fíliae Sion
Ut áuferat ipse jugum captivitátis nostrae.

(¡Mira, Señor, la aflicción de tu pueblo,
Y. envíale a Aquel que vas a enviar!
Envíale al Cordero dominador de la tierra
del desierto de piedra al monte de la hija de Sión
para que Él retire el yugo de nuestro cautiverio)

Rorate Caeli desúper et nubes plúant justum.
(Derramad, oh cielos, vuestro rocío de lo alto, y las nubes lluevan al Justo)

2 comentarios en “Difundiendo el canto gregoriano

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