Domingo XVII durante el año
y víspera de Santiago Apóstol


Para rezar con el salmo de este domingo:
Salmo responsorial- Domingo XVII T. Ordinario -ciclo C

Para orar con la Palabra:

  • No me molestes, la puerta está cerrada
    ¿Puedes mencionar casos en los que tu oración no ha sido escuchada?
  • Pedid y se os dará
    ¿Podríamos decir que el cansancio en la oración proviene quizá de su aparente inutilidad?
  • Vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo piden”.
    Este Espíritu nos permitirá clamar a Dios “Abba, Padre” (Rom 8,15)

España vive la prolongación de un Año Santo Jacobeo.
Jacob es el nombre de un apóstol de Jesucristo:
se ha castellanizado como Yago, de ahí Sant Yago.
Nuestro pueblo le canta como patrón
en los textos de la liturgia hispano-mozárabe
y en himnos hispanos antiguos.
Mañana, 25 de julio,
celebramos solemnemente la Eucaristía.


El GRECO, Apóstol Santiago, peregrino

***

​Hoy rezamos especialmente por nuestros mayores

Para leer:
Carta del Papa Francisco sobre la formación litúrgica del Pueblo de Dios
Carta apostólica Desiderio Desideravi

1 comentario en “Domingo XVII durante el año
y víspera de Santiago Apóstol

  1. Siempre pedagógico, durante estas semanas fragmentos del D.D. para hoy mostrarlo en su poliédrica y cariñosa integridad.
    El arte de la celebración de la liturgia.

    Tres perlas del collar:
    «El domingo, antes de ser un precepto, es un regalo que Dios hace a su pueblo (por eso, la Iglesia lo protege con un precepto).»

    «… el hombre ha de volver a ser capaz de símbolos». Esta tarea concierne a todos, ministros ordenados y fieles. La tarea no es fácil, porque el hombre moderno es analfabeto, ya no sabe leer los símbolos, apenas conoce de su existencia.
    Esto también ocurre con el símbolo de nuestro cuerpo.
    Es un símbolo porque es la unión íntima del alma y el cuerpo, visibilidad del alma espiritual en el orden de lo corpóreo, y en ello consiste la unicidad humana de la persona, irreductible a cualquier otra forma de ser vivo.

    No hay más que ver la forma paradójica en que se trata al cuerpo, o bien tratado casi obsesivamente en pos del mito de la eterna juventud, o bien reducido a una materialidad a la cual se le niega toda dignidad.

    Todo símbolo es a la vez poderoso y frágil: si no se respeta, si no se trata como lo que es, se rompe, pierde su fuerza, se vuelve insignificante.»

    «Las palabras que la Liturgia pone en sus labios (el presbítero) tienen distintos significados, que requieren tonalidades específicas: por la importancia de estas palabras, se pide al presbítero un verdadero ars dicendi. Éstas dan forma a sus sentimientos interiores, ya sea en la súplica al Padre en nombre de la asamblea, como en la exhortación dirigida a la asamblea, así como en las aclamaciones junto con toda la asamblea.»

    DESIDERIO DESIDERAVI
    Gracias

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