La caridad hacia el prójimo urge a los cristianos a que expresen la comunión con los hermanos que van a morir, implorando con ellos y por ellos la misericordia de Dios y la confianza en Cristo.
Los orantes encontrarán en estas plegarias una fuente de consuelo, don del Espíritu, al descubrir el sentido pascual de la muerte cristiana.
— Acoge, Señor, en tu Reino a tu siervos para que alcance la salvación,
que espera de tu misericordia.
R. Amén.
— Libra, Señor, a tus siervos de todo sufrimiento.
R. Amén.
— Libra, Señor, a tus siervos, como libraste a Noé del diluvio.
R. Amén.
— Libra, Señor, a tus siervos, como libraste a Abrahán del país de los caldeos.
R. Amén.
— Libra, Señor, a tus siervos, como libraste a Job de sus padecimientos.
R. Amén.
— Libra, Señor, a tus siervos, como libraste a Moisés del poder del faraón.
R. Amén.
— Libra, Señor, a tus siervos, como libraste a Daniel de la fosa de los leones.
R. Amén.
— Libra, Señor, a tus siervos, como libraste a los tres jóvenes del horno ardiente
y del poder del rey inicuo.
R. Amén.
— Libra, Señor, a tus siervos, como libraste a Susana de la falsa acusación.
R. Amén.
— Libra, Señor, a tus siervos, como libraste a David del rey Saúl
y de las manos de Goliat.
R. Amén.
— Libra, Señor, a tus siervos, como libraste a Pedro y Pablo de la cárcel.
R. Amén.
— Libra, Señor, a tus siervos, por Jesús, nuestro Salvador,
que por nosotros sufrió muerte cruel y nos obtuvo la vida eterna.
R. Amén.
Dígnate, Señor, confortar piadosamente a tu hijos e hijas
para que, en la hora de la muerte,
puedan vencer al enemigo
y entrar con tus ángeles en la vida eterna.
Por Jesucristo nuestro Señor.
Vamos sabiendo fallecimiento de amigos y familiares lejanos y cercanos por COV.
«Dígnate, Señor, confortar piadosamente a tu hijos e hijas… «