Santos ángeles de Dios

Para la oración privada o comunitaria:

Salmo 138 (137), 1-2 (AL, 233)

Delante de los ángeles tañeré para ti, Señor,
* Aleluya.
V. Me postraré hacia tu santuario,
daré gracias a tu nombre, Señor.

R. Aleluya.

 

Oremos al redentor del mundo, nuestro Señor Jesucristo, suplicando,
con toda insistencia que, por su benevolencia
y por intercesión de santa María Virgen, su madre, y de todos sus santos,
se digne concedernos la salvación del alma y del cuerpo,
la remisión de los pecados y la paz.
R. Concédelo, Dios todopoderoso y eterno.
Kyrie eleison.
R. Christe eleison.
Kyrie eleison.

 

Oh luz de luz, claridad inenarrable, Oh Cristo Dios,
sabiduría y fuerza del Padre,
tú te has hecho visible a todos en este mundo
al encarnarte como astro de salvación,
y después de vencer al príncipe de las tinieblas,
verbo hecho carne, subiste de nuevo al cielo;
concédenos, te lo pedimos humildemente
que el esplendor de tu gloria ilumine la oscuridad de este mundo.
Danos como patrono y como defensor al augusto ángel Miguel,
para que nos acompañe en nuestras entradas y salidas,
de modo que, un día, estando a tu diestra, podamos ser coronados.
(Brev. Gothicum, ccciv)
Padre nuestro…

 

Bendición (cf. Br Goth, cccii)
Cristo, el Hijo único del Padre,
el único verbo, al que sirven los ángeles,
nos conceda poder alcanzar la perfección
en las buenas obras.
Que quien hizo excelso en el honor
al arcángel Miguel,
nos haga crecer en el amor.
Que aquel que lo estableció
como defensor de su pueblo,
permanezca bien dispuesto
para acoger nuestras plegarias.
Nos lo conceda aquél,
que en Trinidad, un solo Dios,
vive y reina por los siglos de los siglos.

R. Amén.

 

1 comentario en “Santos ángeles de Dios

  1. Hoy, día de médicos, 4 asuntos con «entradas y salidas», 4 oraciones con los ángeles; un salmo musical para comenzar con sonrisa y placer, y tres intensas oraciones cristológicas (parecía que estaba en Goya en la litúrgia de nuestro nombre). La primera con Santa María y las últimas, de contraste de luz y oscuridad, y contraste entre Miguel y el otro de las tinieblas que fue ángel.
    Que de datos para contrastar con la vida real cotidiana. Que de sorpresas. Que manera de entrar en la jornada de ganarse el jornal.
    Gracias.
    «Locos» de amor a la liturgia estos visigodos.

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