En breve, el Calendario del Rito Romano en España nos ofrecerá la memoria de san Isidoro Hispalense.
En el resto de la Iglesia se recuerda el 4 de abril.
En nuestro país, para que nunca estuviese impedido por la Cuaresma se celebra el 26 de abril.
El Obispo de Sevilla nos ofrece una catequesis sobre la loa aleluyática
(<Laudes> de la Misa o canto del Aleluya como conclusión de la liturgia de la Palabra):
“En las regiones del África, no en todo tiempo,
sino únicamente
los domingos y cincuenta días después de la resurrección del Señor
se canta el alleluia,
para significar la futura resurrección y la alegría pascual.
Entre nosotros, según una antigua tradición hispana,
a excepción de los días de ayuno y de Cuaresma,
todo el año se canta el alleluia, porque está escrito:
<Constantemente permanece su alabanza en mis labios> (Sal 33,2)”.
San Isidoro de Sevilla, De los oficios eclesiásticos.
Editorial isidoriana, León 2007,
Capítulo XIII: De los laudes, pp. 52s.




