Acciones misioneras en esta Cuaresma

puertaSugerencias

Mantener los templos abiertos el mayor tiempo posible, convocando para ello, si fuera necesario, equipos de voluntarios, con el fin de facilitar la oración de los fieles y provocarla en los alejados.

Cuidar que el templo sea acogedor para que quienes entren en él se encuentren a gusto.

Posibilidad de repartir al menos un día al año, un tríptico por las calles con un resumen de los contenidos esenciales de nuestra fe.

Sabemos que hay un gran desconocimiento del Evangelio y es posible que Dios se sirva de este medio para provocar un deseo de encuentro con Él. Esta iniciativa puede ayudar a mantener un breve diálogo con las personas.

Visita a las casas.

Podemos llamar puerta a puerta para ofrecer a nuestros vecinos la experiencia de salvación que hemos vivido en Cristo.

Philip Davydov2Para facilitar la visita debemos pensar en una razón que la justifique: dar a conocer la parroquia y conocer las necesidades del barrio, llevar una sencilla publicación de las actividades parroquiales, informar de Cáritas, etc.

Acoger y acompañar las manifestaciones de religiosidad popular, tanto locales como las de los inmigrantes presentes en nuestra diócesis, como testimonios de la pertenencia a una tradición eclesial viva, cuidando su fidelidad al Evangelio. Ayudar a comprender el sentido de las imágenes, su historia e influencia, y fomentar su devoción.

 

Organizar conciertos evangelizadores en las iglesias y colegios. Tenemos la experiencia que muchos jóvenes se implican en concursos musicales y atraen a otros jóvenes.

 

2 comentarios en “Acciones misioneras en esta Cuaresma

  1. A mi me parece muy difícil lo de ir de puerta en puerta y más en estos tiempos que te vienen a visitar los de equipos de móviles, los testigos de Jehová y los que piden limosna. A ver si alguien con experiencia, nos dice algún modo de abordar esta misión. Gracias de antemano.

  2. Neste tempo deixemos que a acção se sobreponha à palavra .
    Amemos na dimensão da CRUZ eo mundo conhecerá que somos SEUS discipulos.

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