Dentro de una década, en el año 2033, la Iglesia Católica estará celebrando el Gran Jubileo de la Redención con motivo de los 2000 años de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo. Es, por lo tanto, el bimilenario de la Eucaristía: presencia sacramental del crucificado /resucitado en la celebración y la vida de la Iglesia. Conmemorar este hecho histórico es un deber para todos los discípulos del Señor. Conviene preparar caminos que lleven a los cristianos para vivir este acontecimiento como un evento de gracia.
Ciertamente, además de los jubileos que vivimos y viviremos en España: año lebaniego (Cantabria 2023), año del Corazón de Cristo (Valladolid 2023), año de santa Eulalia (Mérida/Badajoz 2024), año de Caravaca (Cartagena/Murcia 2024), etc.
La Iglesia Católica, de manera universal, avanza en la preparación de dos grandes jubileos:
el Jubileo de la Esperanza (Roma 2025)
y el Jubileo universal de la Redención (2033).
“Durante esta década de preparación debemos comprometernos para que el misterio redentor de Cristo continúe moviendo la pastoral de la Iglesia hacia el servicio de Dios y la transformación de la sociedad”.