está en reconocer
la propia ignorancia.
(Sócrates citado en autores hispanos antiguos)
Durante estos martes
la Misa en Rito Hispano (19’00h)
la ofreceremos por los jóvenes
con ocasión de la J M J de Rio.
Señor, Padre santo, Dios eterno y todopoderoso,
que conoces los corazones de todos
y examinas con diligencia lo que se te pide,
te pedimos que acojas y atiendas con amor
no sólo las plegarias que formulamos
sino incluso nuestros más ocultos deseos.
Cuando nos reunimos para pedirte algo,
tú lo sabes todo antes de que hablemos.
Santo y bendito es en verdad
nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo;
él es la confianza de los patriarcas,
la plenitud de la ley,
la sombra de la verdad,
la predicación de los profetas,
el maestro de los apóstoles,
el padre de todos los creyentes,
la firmeza de los débiles,
la fuerza de los enfermos,
la redención de los cautivos,
la heredad de los redimidos,
la salud de los que viven,
la vida de los que mueren;
fue él quien,
siendo el verdadero sacerdote de Dios,
instituyó un nuevo género de sacrificio,
se ofreció a ti como ofrenda agradable,
y nos mandó a nosotros ofrecerla.
Cristo, [es] Señor y Redentor eterno. PS Dom II Cot
Nuestra oración en el seno de la Iglesia y por la Iglesia.
Amadísimos hermanos:
A fin de obtener la misericordia del Señor,
oremos con todo nuestro espíritu,
y presentemos a Dios, por quien queremos ser escuchados,
los sentimientos y deseos unánimes de nuestra comunidad;
que la Iglesia católica,
cual madre de nuestros intereses y esfuerzos,
acoja en su amor los propósitos de todos,
para dispensar a todos los bienes anhelados.
Siguió al Cordero y venció al león.
Cuando el perseguidor se ensañaba, el león rugía.
Pero cómo el Cordero ponía su esperanza en el cielo,
el león era despreciado en la tierra.
liturgia hispana: Illatio del común de un mártir I
Y venció el León de la tribu de Judá (cf. Ap 5.5).
Preparando la fiesta del joven san Pelayo, mr. Mozárabe
oramos por los aspirantes al ministerio

Señor, nos acercamos a ti,
nosotros, pobres siervos sacerdotes,
que, por exigencia de nuestra misma función,
estamos obligados a encomendar a todos los fieles;
ya que no podemos alegar méritos propios,
que, al menos evitemos, con tu ayuda,
los antiguos pecados.
Oración para prepararse
a la celebración de la Santa Misa
tomada del Misal Hispano-Mozárabe
(en español)
Me acerco a tu altar,
Dios omnipotente y eterno,
para ofrecer este sacrificio a tu majestad,
suplicando tu misericordia
por mi salvación y la de todo el pueblo.






