A Cristo se le llama:
León, por el reino y la fuerza.
Cordero, por la inocencia, porque llegó a nosotros humilde.
Se le llama Pan, porque es carne.
Vid, porque hemos sido redimidos con su sangre.
Flor, porque es el elegido.
Camino, porque por él vamos al Padre.
Puerta, porque por él entramos a Dios.
Monte, porque es fuerte.
Roca, porque es la firmeza de los creyentes.
Piedra angular, porque agrupó dos muros bien diversos…
Serpiente, por la muerte y la sabiduría…
Águila, porque después de la resurrección remontó a los astros.
Pastor, porque es guardián de los hombres.
Libro, porque en él están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y de la ciencia (Col 2,3).
Por la sabiduría se entiende toda la plenitud de la divinidad,
es decir, la suya, la del Padre y la del Espíritu Santo.
Por la ciencia se entiende toda la plenitud de nuestra humanidad,
que sólo el Hijo recibió de la Virgen,en el que corporalmente habita toda la plenitud de la divinidad (Col 2,9)…
El libro está cerrado y sellado, y pública y claramente abierto…
Está abierto para los creyentes y cerrado para los no creyentes.
Por eso se dice en Daniel: cierra el texto y sella el libro(Dan 12,4).
Y también se dice en el Apocalipsis de Juan en la primera parte del libro:
Sella lo que han dicho los siete truenos y no lo escribas(Ap 22,10).
Y al final del libro dice: no selles las palabras proféticas de este libro (Ap 22,10).
S. Beato de Liébana, Escritos mozárabes (s. VIII)




Ao contemplar a CRISTO não esquecer que a Fé da IGREJA cristomonistica deve passar a ser cristocentrica. Meditemos