Allelúia piis édite láudibus, Cives æthérei, psállite unanímiter
Allelúia perénne.
Cantad aleluya en respetuosa alabanza; ciudadanos del cielo, entonad unánimemente un aleluya sin fin.
Completuria u oración final
Aleluya en el cielo y en la tierra, se perpetúa en el cielo, se canta en la tierra, allí suena siempre, aquí también fielmente; allí, perennemente, aquí con suavidad; allí con felicidad, aquí con concordia; allí inefablemente, aquí con afecto; allí sin versos, aquí con rimas.
Allí por los ángeles, aquí por todos los pueblos.
Pues, así como no solo en el cielo cantaron alabanzas los ciudadanos del cielo al nacer nuestro Señor Jesucristo sino que también en la tierra anunciaron gloria a Dios en el cielo y paz en la tierra a los hombres de buena voluntad, te pedimos, Señor, que los que imitamos en la tierra el deslumbrante ministerio de esas alabanzas merezcamos compartir con aquellos la dicha de la salvación.
Bendición
Allelúia, nomen pium, atque iocúndum, dilatétur ad laudem Dei in ora ómnium populórum. R/. Amen. Aleluya, que esta palabra sagrada y alegre, resuene como alabanza a Dios en los labios de todos los pueblos. R/. Amén.
Sit in vócibus credéntium clara, quæ in Angelórum osténditur concéntibus gloriósa. R/. Amen. Que así como armoniosamente los ángeles dan gloria con ella, las voces de los creyentes dulcemente la entonen. R /. Amén.
Et, quæ in ætérnis cívibus sine sonórum strépitu énitet, in vestris córdibus afféctu plenióre fructíficet. R/. Amen. Y que lo que sin estrépito reluce en los ciudadanos del cielo, fructifique en vuestros corazones como amor pleno. R/. Amén.
Per misericórdiam ipsíus Dei nostri qui est benedíctus, et vivit et ómnia regit, in sæcula sæculórum. R/. Amen. por la misericordia del mismo Dios nuestro, que es bendito y vive y todo lo gobierna, por los siglos de los siglos. R/. Amén.
Allelúia perénne.
Benedictio ad mensam / Bendición de la mesa Sanctifica, Domine, hanc escam et potum, quæ in nomine tuo accepturi sumus ut per manus sancti angeli tui sanctificatum sumere mereamur. R/. Amen.
Bendice, Señor, esta comida y esta bebida que vamos a recibir en tu nombre, para que merezcamos consumir ambas, santificados por manos de tu ángel. R/. Amén. V/. In nomine Domini nostri Ihesu Christi reficiamus cum pace. R/. Deo gratias. V/. En el nombre de nuestro Señor Jesucristo, comamos con paz. R/. Demos gracias a Dios.
Sal 93,5
Refecisti nos, Domine, in factura tua et in operibus manuum tuarum exsultabimus. Tú nos has alimentado, Señor, con tus acciones, y ante la obra de tus manos exultamos de gozo.
V/. Gloria, et honor Patri et Filio et Spiritui Sancto in sæcula sæculorum. Amen. V/. Gloria y honor al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. A.
(Cod. Silos, Arch. Monástico, 7)
Que yo como sacerdote no consagrado desde el día de mi bautismo sepa decir ALELUYA perénne,no como obligación pero sí como acción de gracias y honor.
Alabado sea el Señor por todo lo que nos da, por los mártires que nos marcaron el camino. Hoy celebramos a Eulalia de Barcelona. Y también a aquellos benditos mártires de Abitinia que declararon «No podemos vivir sin el domingo» sabiendo que,con esa adhesión tan fuerte al mandato de Cristo de celebrar la Eucaristía en su memoria, les iba la vida. Quiero tenerlos siempre presentes para que guíen mis pasos por el mundo a pesar de mis muchas limitaciones. Amen.