Dios todopoderoso,
que concede a los necesitados el remedio de su amor,
os otorgue las lágrimas de Pedro
para purificaros de toda mancha de pecado.
R/. Amén.
Que os conceda, por medio de la doctrina de Pablo,
poder adquirir la sabiduría de la Palabra.
R/. Amén.
Que Pedro por su arrepentimiento y Pablo por su doctrina
os hagan llegar a la vida eterna.
R/. Amén.
Por tu misericordia, Dios nuestro,
que eres bendito y vives y todo lo gobiernas,
por los siglos de los siglos.
R/. Amén.
***
«Celebrando el recuerdo anual de la muerte
de los santos apóstoles,
que tanto vale a tus ojos, Señor, alabamos tu gloria;
porque estas lámparas preciosas que has encendido tú,
Luz verdadera que no conoce ocaso,
iluminan no sólo cuando son leídas
sino también cuando son celebradas.
Ellos son los dos olivos y los dos candelabros de oro
que están en tu presencia.
A toda la tierra ha alcanzado su pregón;
mientras acoges nuestro devoto servicio,
te pedimos que nos concedas por su intercesión,
el espíritu de plegaria,
que nos permita clamar desde la tierra: Padrenuestro…»
(lit. hisp-moz.)
Clavó los ojos en ellos, y le dijo:
«te doy lo que tengo: en nombre de Jesucristo Nazareno, echa a andar.»
Las lágrimas de Pedro.
https://youtu.be/VMb1jKzDGVs