Discípulos del Maestro:
dando razón de nuestra fe

Los cristianos no deben aguardar una invitación para llevar la Buena Noticia de Jesucristo
a quienes andan buscando respuestas a sus preguntas,
un alimento espiritual que les satisfaga, el agua viva.
Los cristianos, alimentados por la palabra y los sacramentos,
deben salir para llevar el Evangelio a todos los ámbitos de la vida cotidiana.
Nosotros, que tenemos la gracia de creer en Cristo,
revelador del Padre y Salvador del mundo,
debemos enseñar a qué grado de interiorización nos puede llevar la relación con él.
La llamada del cristianismo se ha de manifestar, en primer lugar,
a través del testimonio de los miembros de la Iglesia,
de su confianza, su calma, su paciencia y su optimismo,
y de su amor concreto al prójimo.
Todo ello, fruto de una fe alimentada en la oración personal auténtica.

***
Mañana, martes, nos reunimos a las 19 h.
en la Basílica de la Concepción de Ntra. Sra.
c/ Goya 26 Madrid
para la celebración de la Misa en Rito Hispano-Mozárabe.
¡Una ocasión para la oración comunitaria!

 

Un comentario en «Discípulos del Maestro:
dando razón de nuestra fe
»

  1. Escuchando, es decir, leyendo hoy moz.com ha resonado la actitud propuesta como si fuera para un padre ante los hijos propios, tal vez también amigos en la distancia.

    La llamada del cristianismo … (del padre) se ha de manifestar, en primer lugar,
    a través del testimonio … (su testimonio) de (a) los miembros de la Iglesia, (familia)
    de «su confianza, su calma, su paciencia y su optimismo, y de su amor concreto» al prójimo. (hijos sean como sean), los amigos.

    En las etapas fáciles por el instinto, por la amistad y en las difíciles por la ausencia y la separación.
    Los hijos y los amigos son los «injertos » en la planta de «olivo». Devuelven vida.

    Bueno, me he desviado de la idea original… de… «alimentados por la palabra y los sacramentos, deben salir para llevar el Evangelio a todos los ámbitos de la vida cotidiana». Todo ello, fruto de una fe alimentada en la oración personal auténtica.

    Y es que «confianza, calma, paciencia y optimismo, y amor concreto» es una actitud de madurez absoluta. Que bueno…,y no es fácil de compaginar con la «empatía» del señalado, del proscrito, del apartado.

Responder a Eduardo Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *