Este domingo celebramos la VII Jornada Mundial de los Pobres.
Hoy se nos urge a ser buenos samaritanos,
que acojamos con amor a todos aquellos
a los que la vida ha dejado al borde del camino.

Tobit, aconsejando a su hijo, le dice: «No apartes tu rostro del pobre» (Tob 4,7). Este es el versículo escogido por el Santo Padre para el lema de este año 2023.

El Libro de Tobit nos propone que ayudemos a los más necesitados con gestos sencillos y concretos. Los pobres son nuestros hermanos. Estamos llamados a escucharlos, a acogerlos y a descubrir la sabiduría que Dios nos comunica a través de ellos (cf. Evangelii gaudium, 198).

Dice el papa Francisco que «la llamada al bienestar sube cada vez más de volumen, mientras las voces de los que viven en la pobreza se silencian» (n.4). Según Cáritas, en España hay alrededor de 11 millones de personas que viven en situación de exclusión social (un 23,4 % de la población). Por poner sólo un ejemplo: en Barcelona la situación es aún más grave, ya que un 32% de nuestros hermanos (885.000 personas) se encuentran en esta terrible situación. No podemos silenciar ni ser indiferentes al clamor de tantos hermanos que piden nuestro apoyo y solidaridad.

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^{Seguimos rezando cada día por la PAZ en todo el mundo (Ucrania, Sudán, Israel…)}

De acuerdo con la Academia de Derecho Internacional Humanitario y Derechos Humanos de Ginebra, en Medio Oriente y el norte de África se encuentran activos 45 conflictos armados, 35 en el resto del continente africano, Asia cuenta con 21 conflictos en activo, Europa tiene 7 y América Latina es escenario de seis conflictos armados, aunque estos incluyen también violencia criminal.

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^{En noviembre rezamos, de manera especial, por los difuntos}

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El 21 de noviembre celebramos en la Ermita de san Isidro,
a las 19 h., la Misa en Rito hispano-mozárabe
de la fiesta de la Entrada de María en el Templo de Jerusalén.
Metro: Marques de Vadillo
Bus: 25,17 y 50.

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Anoche comenzó el Adviento hisp-visig  (Cerceda, Madrid)