4 comentarios en “Nos vemos con el Señor y los hermanos…

  1. Insisto. A lo que se nos invita, no se trata de … una misa mas.
    Es un acontecimiento, una experiencia, una oportunidad.

    No es diaria, no es en festivo, no es parroquiana.
    No se repite, está cuidada, es diocesana, obliga a estar atento, a participar.

    Pero lástima que este templo tenga una barandilla separando el presbiterio, que brille mas el retablo que la mesa del altar, que la iluminación exagerada del presbiterio haga contraluz a los fieles, que sea necesaria la megafonía.

    Me gustaría una arquitectura mas sobria, mas envolvente, mas cercana y a la vez misteriosa. El espacio es importante en el rito y la liturgia.

    Con todo esto a favor y con estos inconvenientes…menores… Salimos radiantes, y mucho mejores de como entramos. Y el saludo en la calle es…antesala del paraíso, es manifestación real de lo que se asiente en los muchos «amén» de respuesta activa, Es el «me gusta»…quiero todo lo que se ha dicho dentro de la ceremonia, es tocar, no solo oír.

  2. Me encanta lo que escribe Eduardo!

    La misa mozárabe es, en efecto, algo especial que no se parece a ningún otro rito que yo conozca. Nos envuelve con su belleza. Tengo la impresión que nuestras oraciones y cantos suben con el incienso, como dice la oración.

    Y estoy de acuerdo que la iglesia con toda su luz y brillo y su grandiosidad no es la mejor. Pero creo que la intensidad de la oraciòn, la belleza de los textos, nos ayuda olvidar esas pequeñas inconvenientes y nos envuelve interiormente.

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