Mañana (D.m.) celebramos la misa hisp-mozárabe
en la víspera de la fiesta nacional de España
recordando a Santa María, bajo la advocación del Pilar

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«La paz sea contigo,
quienquiera que limpio
y con corazón pacífico
entres en el santuario de Cristo Dios.
Quienquiera que salgas de la casa del Señor
una vez realizadas debidamente las plegarias,
regresa con el cuerpo,
quédate aquí con el corazón».
Inscripción del s. VII conservada en el museo nal. de arte visigodo de Mérida

“Las primeras comunidades cristianas de Hispania
no debieron ser muy ricas desde el punto de vista económico
y para construir iglesias hacen falta medios y recursos.
Solo cuando la comunidad y el obispo
poseen los medios suficientes pueden emprender obras de envergadura
se comienzan a construir iglesias
que impactan por su presencia y monumentalidad.
El ejemplo más evidente en Hispania se halla en Mérida
ya que la Iglesia (el obispo) de Mérida,
se encuentra a mediados del siglo VI,
en una situación financiera boyante
como consecuencia de la herencia recibida por el obispo Paulo…
lo que le permitió comenzar las obras de construcción de iglesias y basílicas.
Pero esto no sucedió hasta mediados del siglo VI,
como nos atestiguan las Vitas Patrum Emeritensium”:
J. Arce, De la ciudad pagana a la ciudad cristiana. El caso de Hispania (siglos IV-VI),
en S. Panzram – L. Callegarin, Entre civitas y madina…, Madrid 2018, 26s.

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Este mes tenemos ofrecemos dos encuentros formativos:
15 oct. 12 h. interesante conferencia sobre el año litúrgico;
26 oct. 19 h. presentación de un nuevo libro sobre mozárabes
en el que escriben dos miembros de Gothia:
P. Diego Figueroa y
P. Gaspar Muñiz.