En la mitad de la Cuaresma…

W Cristo de la MisericordiaOh Cristo,
tú eres el creador y el redentor de todas las criaturas;
repara nuestros ánimos cansados
por la fuerza de tu poder;
y ya que, guiados por ti,
hemos transcurrido estos pasados días de abstinencia,
ayúdanos para que podamos cumplir con diligencia
lo que nos queda de nuestro servicio cuaresmal.
Por esto mereces la alabanza debida
por el bien que has iniciado
y para ti son las muestras de honor y agradecimiento
por cuanto haces en la mitad o al final de este tiempo.
En la mitad de los ejercicios cuaresmales,
te pedimos que aceptes esta oración
que hacemos siguiendo tus preceptos,
y concédenos, por la misma,
no dejarnos abatir por las dificultades presentes
y poder ser reconfortados por la alegría que esperamos:

Padre Nuestro…

(Introducción a la oración dominical en la IV semana cuaresmal)