Es justo y necesario,
es en verdad nuestro deber y salvación
darte siempre gracias por tu bondad,
Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno,
por Jesucristo, tu Hijo,
Rey sempiterno que reina contigo,
que, por nuestra salvación,
ha soportado tantas y tan grandes pruebas.
Fue sometido a juicio por los judíos
el que ha de juzgar a vivos y muertos.
Rezando en la alegría de la Pascua
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