Viernes Santo de la Pasión del Señor

 

En este día, en que “ha sido inmolada nuestra Víctima pascual, Cristo” (1 Cor 5, 7),
la Iglesia, meditando sobre la Pasión de su Señor y Esposo,
así como adorando la Cruz,
conmemora su nacimiento del costado de Cristo dormido en la Cruz
intercede por la salvación de todo el mundo.
La Iglesia, siguiendo una antiquísima tradición,
en este día no celebra la Eucaristía.
El Viernes de la Pasión del Señor es un día de penitencia
obligatorio para toda la Iglesia
por medio de la abstinencia y el ayuno.

 

Es el día en el que, según la tradición hispana,
se elevan a Dios súplicas insistentes pidiendo el perdón (Indulgentia).
***

 

Un Viernes Santo
para orar insistentemente
por nuestros hermanos enfermos,
por todas y cada una de las personas
que hacen posible nuestra vida diaria
(desde quien conduce un camión de suministros
hasta quien recoge las basuras, o ….)
y por los difuntos
para que alcancen la luz eterna.

 

Iniciando la Pascua: Cena y traición

Conectamos con las celebraciones litúrgicas
por medio de la radio, TV o internet
recordando hoy que “con la Misa
que tiene lugar en las horas vespertinas del jueves de la Semana Santa,
la Iglesia comienza el Triduo Pascual
y evoca aquella Última Cena,
en la cual el Señor Jesús en la noche en que iba a ser entregado,
habiendo amado hasta el extremo a los suyos que estaban en el mundo,
ofreció a Dios su Padre su Cuerpo y su Sangre bajo las especies del pan y del vino,
y los entregó a los apóstoles para que los sumiesen,
mandándoles que ellos y sus sucesores en el sacerdocio
también los ofreciesen” (FFPP 44).

Toda la atención del espíritu se centra en los misterios que se recuerdan en la Misa: es decir, la institución de la Eucaristía, la institución del Orden Sacerdotal, y el mandamiento del Señor sobre la caridad fraterna.

 

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Acabando la Cuaresma…

«No te apartes de nosotros,
muéstrate como nuestro Dios.
Dígnate permanecer en nosotros
y luchar en favor nuestro.
Si Tú luchas, podremos vencer».
(Del Rito Hispano-Mozárabe)

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La tradicional Misa Crismal, en la que tiene lugar la bendición de los santos óleos y la consagración del crisma, se celebrará en la diócesis de Madrid, HOY Miércoles Santo, 8 de abril, a las 12:00 horas.

Como el presbiterio diocesano no podrá estar presente, queda pospuesta la renovación de sus promesas sacerdotales. Oremos por nuestro obispo y por las vocaciones al ministerio presbiteral y diaconal.

Podremos unirnos por medio del canal de YouTube de la diócesis

(Archidiócesis de Madrid).

***

Intensifiquemos nuestra colaboración con CARITAS
con un generoso donativo en esta Pascua.
¡Es un buen compromiso al final de esta Cuaresma!

Una Semana intensa aunque diferente

 

Estamos en la Semana que cambió la historia del mundo.
Es la Semana que encierra la Noche esperada durante todo el año:
la santa Pascua (tras el plenilunio de primavera).
***

 

• HOY, martes, enviamos este enlace para difundir:
Si las circunstancias lo permiten
ofrecen la posibilidad de rezar la HORA SANTA
-para la noche del Jueves-
desde Getsemaní (Jerusalén).

 

Respondemos a la petición de Jesús
de velar una HORA con Él (Mateo 26,40).
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La tradicional Misa Crismal, en la que tiene lugar la bendición de los santos óleos y la consagración del crisma, se celebrará en la diócesis de Madrid, mañana Miércoles Santo, 8 de abril, a las 12:00 horas.

Como el presbiterio diocesano no podrá estar presente, queda pospuesta la renovación de sus promesas sacerdotales.

Podremos unirnos por medio del canal de YouTube de la diócesis

(Archidiócesis de Madrid).

 

Confinamiento: tiempo, también, para la acción

 
«Crezcamos en la experiencia de ser agradecidos,
pues ahora vamos valorando todo lo que antes se nos ha dado.
Si tenéis cualquier necesidad,
o sabéis de alguien que la tiene,
no dejéis de comunicarla.
Vamos en la misma barca,
nosotros,
y muchísimos más».

 

P. Diego J. Figueroa
 <Gothia>
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No está de más
-en estos días-
una carta o un mensaje,
una llamada o un «guasap».
No podemos estar junto a otros
pero podemos/debemos
estar en comunicación
los unos con los otros.
¡Que ninguno se sienta solo!

 

Domingo de Ramos en la Pasión del Señor

 

Oramos con nuestra antigua liturgia hispana:

 

Señor Jesucristo, que antes del comienzo del mundo reinas con el Padre y el Espíritu Santo reinas y tu reino no tendrá fin.

Que has venido en la plenitud de los tiempos para la salvación del mundo, tal y como habías prometido por la ley y los profetas, grandes muchedumbres, al enterarse de que te venías ya a Jerusalén para la fiesta, se te acercaron y se pusieron a gritar de alegría y cortaron ramos de palmera gritando:
Hosanna al hijo de David.
Por eso nosotros también suplicantes, en oración insistente, rogamos a tu majestad;
que ya que has venido para redimirnos, nos libres de los vínculos de nuestros pecados.
R/. Amén.

 

Disipa nuestros males.
R/. Amén.

 

Cura nuestras enfermedades.
R/. Amén.

 

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Fiesta del Hispalense

El calendario mozárabe de Córdoba (s. X)
señalaba el día 4 de abril
para conmemorar a Isidoro de Sevilla.

El hispalense
“cuyo nombre debe pronunciarse con reverencia”,
según los Padres del Concilio de Toledo,
es un gran maestro
que vive, celebra y enseña.

El «Doctor de España» publica mucho pero
entre sus obras sobresalen:
EtimologíasDiferencias, Sinónimos Los Oficios de la Iglesia.

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Viernes de la quinta semana de Cuaresma:
María, nueva Eva

 

«Ya desde el principio del mundo nos revelaste, Padre,
la importancia del ayuno,
porque si Eva, madre del género humano,
hubiera respetado el árbol prohibido,
habría conservado su patrimonio e inmortalidad».
(Illatio cuaresmal hisp-moz)

 

***
Hoy, desde el dolor,
miramos a la Madre de los Dolores.
Con Ella queremos acompañar a Cristo en su Pasión;
a Ella encomendamos a todos nuestros hermanos
que participan en su cuerpo de la Pasión de Cristo.

 

<Sacrificium>: canto procesional

Procesión de ofrendas -al canto del Sacrificium- en la fiesta de san Pelayo (Oviedo, 2019)

En la celebración eucarística los dones de pan y vino eran, antiguamente, depositados en el donarium y llevados al altar por los ministros durante el canto de ofrendas denominado Sacrificium.

Isidoro de Sevilla nos muestra que la liturgia visigótica no era ajena a este despliegue simbólico; es más, indica un paralelismo con la procesión con el Evangeliario.

De idéntica costumbre, en época mozárabe, se hace eco Beato de Liébana:

 

<Se llevan cirios
cuando se lee el Evangelio o
se presentan las ofrendas para el sacrificio>

 

El texto de san Isidoro (Etym. VII 12, 29s), al que luego sigue Beato (Com. Apoc. II, Prologus 4, 79ss, 140), describe al ceroferario como ‘el que lleva el cirio’:

«Acolythi Graece, Latine ceroferarii dicuntur, a deportandis cereis, quando legendum est Evangelium, aut sacrificium offerendum».

En román paladino:

«Lo que los griegos llaman “acólito”, es en latín ceroferario, porque lleva las velas de cera cuando va a leerse el Evangelio o a ofrecerse el sacrificio».

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Hoy se cumplen 15 años de la muerte de san Juan Pablo II.
A él le encomendamos nuestros enfermos y moribundos
y todos los que sirven con su trabajo a la comunidad social.